Procter & Gamble es hoy en día uno de los mayores anunciantes a nivel global, pero además es uno de los más comprometidos con las sociedades en las que opera. El último ejemplo es su campaña My Black Is Beautiful, en la que un grupo de madres afroamericanas comparten sus miedos y desvelos por sus hijos.
La historia transcurre en diferentes épocas en las que podemos ver cómo las madres consuelan y apoyan a sus hijos tras vivir situaciones de racismo, animándoles a mantener la cabeza en alto sin importar cuál sea el desafío al que tengan que hacer frente en la vida.
Un emotivo y valiente spot dirigido por Malik Vitthal y que ha sido creado por BBDO New York. Una acción que deja claro que el racismo continúa siendo una triste lacra y un problema que pervive en muchas sociedades.
“Sabemos que los sesgos por raza no son solo cosa de los afroamericanos. La discriminación es un problema que se presenta bajo muchas formas, como el sexo, la religión o la orientación sexual y nuestro objetivo con esta campaña es concienciar de las consecuencias que tiene”, explica Damon Jones, director de comunicaciones globales de P&G.