Por Agustín Grau Adsuar
¿Tu negocio te hace libre o te esclaviza?
Esta es una buena pregunta que todo emprendedor debería hacerse antes de poner en marcha su idea de negocio.
En principio, el objetivo de toda empresa es obvio: ganar dinero. Ahora bien, ¿nos hemos planteado de qué manera vamos a ganarlo, cómo van a venir los ingresos?
De la respuesta a esta pregunta dependerá que nuestro negocio, además de proporcionarnos ingresos, nos aporte calidad de vida o nos la reste. Es más, dependerá que nos conduzca cada vez más al estado llamado de libertad financiera o nos esclavice y haga más dependientes del trabajo mismo.
La libertad financiera, en principio, es aquel estado en el que los ingresos superan a los gastos. Pero se requiere algo más: se requiere que dichos ingresos provengan o se produzcan de determinadas formas para no atarnos cada vez más a su proceso de producción y sí en cambio hacernos cada vez más libres, más independientes, más soberanos y con mayor calidad de vida.
¿Cuáles son las cinco características que debe reunir una idea de negocio para proporcionarnos libertad financiera?
- Ser expandible
Hay negocios que pueden expandirse y negocios que no. Hay negocios que tienen un límite (de producción, de ingresos) fijado de antemano y negocios que, por su propia naturaleza, son expandibles ad infinitum o casi, es decir, son negocios que no se agotan. En el primer caso tendríamos, por ejemplo, la producción de hortalizas o frutas en una parcela de determinada extensión. En el segundo tendríamos, por ejemplo, la producción de energía solar o eólica a través de sus mecanismos respectivos.
En el primer caso, el negocio no es expandible más allá de un cierto límite; en el segundo no existe esa limitación. A mayor capacidad de expansión, mayor capacidad de producir ingresos y mayor capacidad de otorgar libertad financiera.
- Ser escalable
Un negocio escalable es aquel en el que la curva de ingresos (y por tanto la curva de beneficios) no guarda relación de proporción con la de gastos, sino que crece mucho más allá de ésta. Lo vamos a ver claro con un ejemplo. Para producir zapatos podemos tener un coste X, por ejemplo, por unidad, y obtener un beneficio Y.
Si producimos 10 zapatos, gastamos 10X y obtenemos un beneficio de 10Y. Por contra, para producir un vídeo tenemos un coste X de una sola vez y un beneficio de tantas veces Y como lo vendamos. Es decir, los gastos son fijos o casi, y los beneficios se producen a una velocidad muy superior, fuera de toda relación de proporción con la de gastos. Gastos lineales versus ingresos exponenciales.
- Estar automatizada
Esto es importante. Si la idea de negocio no la tenemos automatizada tenemos muchas posibilidades de convertirnos en su esclavo, de trabajar para ella y hacernos dependientes de la misma. Dejamos de tener un trabajo para pasar a tener una cárcel.
Un negocio automatizado es aquel en el que, desde el inicio del proceso hasta el momento final de la venta, todas las etapas están definidas y configuradas para producirse y tener lugar sin intervención directa de nuestra parte. A lo largo del proceso no tenemos que hacer, decidir, resolver, modificar, etc. El proceso está automatizado, funciona de acuerdo a un plan prefijado de antemano y por eso nos otorga libertad (que en última instancia se convierte en libertad financiera).
Alguien puede pensar que esto es imposible, pero lo vemos todos los días en internet. Desde el momento en que alguien sube a la red un producto digital para su venta se puede organizar todo el proceso para que no tengamos que hacer nada más si no queremos: desde el marketing, la difusión y la publicidad del producto, hasta el acto mismo de la venta y el cobro.
- Ser apalancable
Un negocio apalancable es aquel que permite el uso de palancas, y una palanca es un mecanismo que nos permite conseguir más con menos, es decir, nos permite conseguir resultados sensiblemente superiores a los del esfuerzo empleado en conseguirlos. Si con una acción X conseguimos un resultado Y, con el uso de una palanca X conseguimos un resultado de 10Y. La palanca multiplica los efectos de nuestra acción.
Un ejemplo de palanca son los libretos de mylibreto. Con una sola acción (publicar el libreto) conseguimos muchos resultados: ofrecer la compra del libro, mostrar una parte de su contenido, posibilitar que se comparta en redes sociales, etc.
Otro ejemplo de palanca son los agregadores de ebooks (por ejemplo éste): plataformas en las que con una sola acción (subir el ebook) se lleva a cabo su publicación en diferentes librerías online.
- Permitir el uso de redes
Utilizar redes es un mecanismo que, igualmente, nos permite multiplicar los resultados de nuestras acciones, lo cual significa, en última instancia, libertad financiera o mayor posibilidad de ésta. Con una acción X conseguimos Y; con una red X conseguimos 10Y. En La fórmula del éxito, mi primer libro publicado, ya establecimos que había diferentes tipos de redes: de trabajo, de contactos… En cualquier caso, la red nos permite ir más allá que con nuestra sola acción, nos permite incrementar ingresos, incrementar beneficios y lo que es más importante: posibilitar que el negocio funcione aunque un elemento de la red (que podemos ser nosotros, por ejemplo) no intervenga en un momento determinado. Todo eso supone, efectivamente, libertad financiera.
Estas son las cinco características esenciales para que un negocio nos aporte calidad de vida e independencia. Todo lo que vaya en esa dirección, a mi juicio, es liberador. Por ello, una buena planificación antes de lanzarnos con nuestra idea es fundamental para ahorrarnos trabajo y multiplicar beneficios.
Agustín Grau Adsuarinfo@noergia.com
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