Durante las pausas publicitarias en la televisión muchos recurrimos en nuestro teléfono móvil para evadirnos de los anuncios publicitarios. Pero, ¿y si esos indeseables spots se colaran en nuestro smartphone (para hacernos un refrescante regalo)? Muy probablemente tendríamos una opinión más benigna de ellos.
Con esta idea en mente los creativos de Coca-Cola han lanzado en Israel un anuncio que se jacta ser el primero en la televisión que se ve, se oye y se saborea, y lleva definitivamente a un nivel superior el fenómeno de la segunda pantalla.
El spot en cuestión viene pertrechado de señales de audio ultrasónicas que envían (casi mágicamente) paquetes de datos al smartphone del telespectador.
Echando mano de esta tecnología, alumbrada por la startup DOV-E, el televidente recibe automáticamente en su teléfono inteligente una notificación que le informa que, si lo desea y con la ayuda de la app de transporte Gett, puede recibir en su domicilio pulsando simplemente un botón (y totalmente gratis) dos botellas de Coca-Cola, una nevera portátil y un abrebotellas.
Con esta campaña, que con tan buen tino fusiona medios digitales y medios tradicionales, Coca-Cola se las ha ingeniado para refrescar y curar de su aversión a la publicidad televisiva a muchos israelíes.