La agencia Brandenburg ha realizado una llamativa campaña para la empresa Seafood en Islandia, buscando reflejar el tremendo orgullo que sienten los islandeses del pescado en su país, tanto que lo celebran dos veces por semana con una tradición conocida como «Fishmas».
En el corazón de la campaña, ejecutada tanto en el Reino Unido y como en EE. UU. con la intención de promover la tarifa islandesa entre los supervisores de los clientes, se sitúa esta película vanguardista que muestra a personas en Islandia, incluidos los elfos pescadores y el padre Fishmas, preparándose para las celebraciones de “Fishmas” dos veces por semana, cuando las familias se reúnen para comer pescado, imitando ciertas escenas navideñas.
La idea de “Fishmas” fue desarrollada íntegramente por esta agencia, que considera que como Alemania y España tienen sus propias fiestas centradas en la comida y la bebida (Oktoberfest y La Tomatina, por ejemplo), Islandia debería tener su propia versión. Por eso, además de la película, Brandenburg creó Fishmas.com, donde los consumidores pueden encontrar recetas de pescado, ya que, según la agencia, «ninguna fiesta está completa sin recetas festivas, buena comida y comidas familiares agradables«.
La idea festiva fuera de lo común, declaró el director creativo de Brandenburg, Hrafn Gunnarsson, está diseñada para promover el pescado islandés como un producto premium y captar la atención de la gente con humor. En este sentido, también apuntó que el concepto era un poco como una «Navidad con abundancia de bacalao«.
“Fishmas es la celebración del pescado en Islandia. El pescado es el orgullo de la cocina de Islandia, es una de las partes más importantes de la economía islandesa y nuestra principal exportación. Entonces, para presentarle al mundo, creamos esta festividad y su portavoz, el Padre Fishmas. Pero, a diferencia de otras celebraciones y festivales, Fishmas se celebra al menos dos veces por semana porque a los islandeses se les ha enseñado desde una edad temprana a comer pescado al menos dos veces por semana”, explicó Gunnarsson.
“El anuncio cuenta la historia del padre Fishmas y cómo pasa sus días preparándose para la gran celebración. Fue una buena manera de incorporar las cuatro propiedades principales del producto: producción de alta tecnología, sostenibilidad y el legado y pureza del pescado islandés”, destacó, añadiendo que «queríamos crear una historia interesante y divertida sin comprometer la credibilidad del producto». El anuncio fue filmado en Islandia después del encierro, y para mantener el distanciamiento social, las escenas tuvieron que ser ejecutadas con cuidado, con actores y equipo separados en diferentes grupos, como confirmó Gunnarsson.