84.Paris es la agencia que ha creado para Greenpeace una campaña con ambiente navideño para concienciar sobre los peligros derivados de la contaminación del aire. La acción, dirigida por Anna Mantzaris, dura minuto y medio, tiempo en que muestra la conmovedora historia de una niña y su oso con un final simplemente exquisito.
Cuando la pequeña se entera de los peligros para la salud que supone respirar el aire contaminado, hace todo lo posible por protegerle. Motivo por el que le regala por Navidad una mascarilla hecha a mano.
El anuncio finaliza con un mensaje muy claro: ninguna máscara puede protegernos del aire contaminado, más aún si tenemos en cuenta que en Francia el 75% de los niños respira aire de mala calidad.
Y es que la contaminación del aire es uno de los problemas más preocupantes de las grandes ciudades. En Francia es responsable de la muerte de casi 48.000 personas. Una cifra que supera los 5,5 millones a nivel global, siendo la cuarta causa de muerte en el mundo.
“Con esta campaña queríamos contar una historia que respetase los códigos y el espíritu de la Navidad transmitiendo a la vez un mensaje para concienciar sin adoptar un discurso moralizador”, explican Olivier y Hervé Bienaimé, presidentes y directores creativos de 84.Paris.