Para nadie es un secreto que las pequeñas y medianas empresas son la base económica para una gran parte de los mercados alrededor del mundo. No obstante, hablamos de estructuras empresariales con un tiempo de vida reducido, lo que limita en muchos sentidos el desarrollo económico de un país.
Al tomar un caso en particular, tenemos que en México de las 4.962.061 unidades empresariales registradas, el 99,8% son pequeñas y medianas empresas, mismas que son responsables de generar el 52% del Producto Interno Bruto (PIB); no obstante, la esperanza de vida promedio de estos negocios es de 7,7 años, según números del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
En este sentido, una de las grandes áreas de oportunidad está en reforzar dentro de este sector la importancia que las acciones de marketing tiene para hacer crecer un negocio.
Un reciente informe entregado por LeadPages indica que el 47% de los emprendedores y pequeñas empresas gestiona sus estrategias de mercadotecnia de manera autodidacta y personal, con lo que sólo el 6% de las mismas pone estas tareas en manos de una agencia o empresa especializada. Lo anterior deriva en que el 48,5% de las pequeñas y medianas empresas carezcan de conocimientos sobre la efectividad de sus esfuerzos de marketing.
Una de las grandes limitantes al respecto son los presupuestos reducidos. Por décadas para las empresas de menor tamaño, planear, desarrollar y ejecutar acciones de mercadotecnia suponía inversiones que estaban fuera de su alcance.
No obstante, con la llegada de las tecnologías digitales dicha realidad ha cambiado y hacer marketing es una tarea cada vez más accesible para cualquier negocio.
¿Cómo deben las pequeñas y medianas aprovechar estas oportunidades?
En un universo infinito, el camino es ser selectivo. Una de las grandes bondades y a la vez un gran desafío que pone sobre la mesa el entorno digital es la gran cantidad de plataformas, medios y canales adecuados para ejecutar técnicas de marketing diversas.
Cada una de estas opciones demanda un tratamiento e inversión diferente, por lo que es preciso seleccionar aquellos espacios que representen valor para el negocio de la pyme con base en una estrategia previa claramente definida, en donde aspectos como los hábitos del target son piezas clave.
- Entender a la nueva competencia
Dentro del ámbito digital es vital entender que la competencia no pertenece única y necesariamente a la categoría en la que se mueve nuestro negocio. La batalla por ganar la atención y no sólo la decisión de compra de la audiencia homologa a los rivales, a lo que se suma que el propio consumidor, en su calidad de generador de contenido, es también un competidor a vencer.
Frente a este contexto, las pequeñas empresas están obligadas a entender con mejor precisión a su mercado y aprovechar que, en su mayoría, son negocios locales capaces de generar casi por definición una atracción con las audiencias basada en temas emocionales y de empatía.
- Datos y automatización, tus mejores aliados
Como lo indican desde The Drum, cerca del 50% de las pymes desconoce si sus esfuerzos de mercadotecnia son efectivos, mientras que el 14% tiene certeza de sus resultados. La gran cantidad de datos y el conocimiento de negocio que los mismos suponen son la clave para cerrar esta brecha.
Tecnologías como la inteligencia artificial y la automatización de funciones figuran como grandes aliados al respecto. El desafío para las empresas estará en documentarse sobre estos avances para identificar cuáles son sus beneficios y cómo pueden aprovecharlos a favor de sus negocios.
