Luego de una noche de baile y alcohol, el cuerpo pide al amanecer algo para reponer fuerzas. Por eso, pensando en la inminente resaca, McDonald’s ha lanzado una nueva campaña en Suecia haciendo un guiño a los noctámbulos.
Los anuncios que integran la nueva campaña de la cadena de los arcos amarillos llevan la firma de la agencia Nord DDB y del fotógrafo Alexander Crispin, quienes colocan bajo los focos apetitosas hamburguesas con sus correspondientes raciones de patatas fritas contempladas desde la base de un vaso donde están depositados los remanentes de alguna bebida alcohólica.
«Sabemos que a nuestros clientes les gusta que nuestros anuncios reflejen el comportamiento humano. Y la idea magnífica de agarrar un Big Mac de camino a casa después de una noche de fiesta es algo con lo que todo el mundo puede sentirse identificado«, explica Staffan Ekstam, director de marketing de McDonald’s en Suecia.
En línea con el target al que van dirigidos sus anuncios, McDonald’s ha decidido emplazarlos en localizaciones cuidadosamente elegidas por su proximidad a bares y clubes nocturnos.
Hace aproximadamente un año la multinacional estadounidense fijaba asimismo la mirada en el mundo de la noche en una campaña lanzada en Nueva Zelanda, donde las luces nocturnas daban lugar en forma de reflejos a las inconfundibles siluetas de tres icónicos productos de McDonald’s: el Big Mac, el cheeseburger y las patatas fritas.